El Gobierno de México ha aprobado la prohibición de 35 plaguicidas altamente peligrosos, mediante un decreto publicado el 3 de septiembre de 2025. Esta medida es presentada como la acción más ambiciosa de este tipo en más de 30 años, superando la última restricción similar de 1991
La restricción implica la prohibición total en el país de la importación, producción, comercialización y uso de estas sustancias. Entre los químicos prohibidos, figuran algunos sumamente tóxicos, como aldicarb, carbofurán, endosulfán y DDT—estos últimos, reconocidos por sus graves efectos nocivos al ser altamente tóxicos y persistentes en el ambiente
El anuncio fue hecho por el secretario de Agricultura, Julio Berdegué, con el respaldo de la presidenta Claudia Sheinbaum y diversas dependencias federales (SADER, Cofepris, Economía, SEMARNAT), dentro de una estrategia más amplia para impulsar una agricultura más limpia, segura y sostenible.
Además, se contempla que esta reducción de plaguicidas ocurrirá en etapas:
Segunda fase en el primer semestre de 2026
Una tercera etapa de restricciones en 2027, con regulaciones más estrictas y promoción de alternativas seguras.
Organismos como la OPS y la UNAM habían advertido de los impactos de estas sustancias: riesgos para la salud, biodiversidad (abejas polinizadoras) y ecosistemas acuáticos.